martes, 4 de diciembre de 2012

RAZÓN



Y sí.
Pienso en él, es inevitable, mi corazón y mi vagina lo necesitan. Estuve negociando con la razón, negocié hora tras hora.
Y hoy la razón ganó.
HOY GANÓ.
Es día a día.
Cada día que pasa, es una razón más para olvidarlo.
Para dejarlo ir.
Recurro a mis reservas de amor propio.
Recurro a mi naciente autoestima.
Recurro a la memoria de otros dolores.
De otro hombre que también fue imposible.
Lleno mis días con creatividad.
Lleno mis días con kilómetros de hilos, con metros de telas, con cierres,  botones, lentejuelas y mi taza gris con el infaltable té. Estoy leyendo, entendiendo.
Estoy buscando mi centro.
Encontrándome.
Aspirando este olor a tierra húmeda que me llena de oxígeno y de vida....

No hay comentarios:

Publicar un comentario