Junté coraje y dí la cara. Te dije que yo era yo. Por supuesto negaste todos los cargos en tu contra. Dijiste ser incapaz de arruinarme la vida a ese nivel. Yo con unas ganas increíbles de creerte. Con el corazón latiendo en demasía. Con los ojos llenos de lágrimas de tantos años de extrañarte en un tenue silencio. Me sirvió hablar con vos porque ya sé que no te Amo. Ya sé que solo fue querer saber porqué. Decís que no guardas rencor... No sé si creerte, no sé que pensar. Tenerte a un toque de pantalla es tentador, me quedó pendiente matarte entre las sábanas alquiladas de un hotel. Ser por 2 horas esclava tuya y Diosa que derrame en tu piel la anatomía de la más profunda caricia. Me quedó pendiente quererte con todas mis células epiteliales. Me quedaste colgado de los ovarios. Que de vez en mes se desangran de dolor...Como mi corazón